UCDM 23.IV

REFLEXION DESDE LA CONCIENCIA.-

CAP- 23- LA GUERRA CONTRA TI MISMO.

IV. POR ENCIMA DEL CAMPO DE BATALLA.

Luego de leer la sección 23.IV de UCDM, lo que me vino a la mente fue la frase: “Toma distancia”. Toma distancia de las cosas y trata de verlas desde otra perspectiva. Desde una perspectiva más amplia e incluyente.  “Tenerle miedo a Dios es tenerle miedo a la Vida, no a la muerte”.  Si somos Hijos de Dios, entonces somos Hijos de la Vida. ¿Y cómo temerle al Padre? Y la Vida nos dio la capacidad de crear, que es la forma como Dios se extiende a Si Mismo. Cada uno de nosotros es co-creador con Dios. Y la vida no crea a la muerte, puesto que solo puede crear a semejanza propia. Entonces la muerte no existe.

Dios crea, se extiende y se comparte sin pérdida alguna. Se nos encomendó crear, porque el Hijo de Dios, a su imagen y semejanza puede crear.  Y para crear debes perdonar a todos tus hermanos completamente.  Si no eres capaz de perdonar completamente, serás incapaz de curar y hacer milagros.

Contempla la batalla desde lo alto, y entiende que eso que estás viendo no es real. Cuando sientas las señales: una punzada de dolor, un ápice de culpa, pero sobre todo la pérdida de la paz, es porque te involucraste en la batalla, en la cual solo puedes fracasar. Cuando las señales de la batalla se presenten escoge un milagro, para que cambie tu percepción, para corregir lo que estás viendo.

Si te identificas con el cuerpo estarás dentro del campo de batalla. Sin embargo el cuerpo no tiene ningún propósito. Vive en la abundancia de Dios, en donde lo tienes todo, y cualquier clase de pesar es inconcebible.

Cuando eres consciente de la fortaleza de Dios jamás puedes pensar en las batallas. Pues que batallas podrías librar con aquel que lo es todo, que tiene todo y en donde lo encuentras todo. Y me trae a la mente la cualidad del Maestro de Dios, la Mansedumbre. Para los Maestros de Dios el daño es algo imposible. No pueden infringirlo, ni sufrirlo. El daño es el resultado de juzgar. Y juzgar es tomar posición en la batalla. Y ¿qué podemos defender en contra de la verdad?