LA PAZ EN MI PAÍS.

La Paz no está amenazada por aquellos hombres que creen en la Ley y en la Justicia. No está amenazada por aquellos que creen en la libertad, y respetan los derechos de los demás. No está amenazada por aquellos que trabajan para y por sus familias cumpliendo sus deberes y obligaciones. Asumen responsabilidades porque son hombres de Paz.

La Paz está amenazada por aquellos que han violado la Ley muchas veces. Por aquellos que piensan que solo a través de la fuerza podrán imponerse. Y le tienen pavor a las ideas, porque saben que las ideas son más fuertes que cualquier cosa.  Le temen a la libertad porque saben que un hombre libre no acepta imposiciones vengan de donde vengan. No aceptan la verdad porque viven del engaño.  No quieren ver la realidad porque están acostumbrados a vivir en la mentira.  No quieren perder el poder, porque saben que con el poder compran voluntades, más no fidelidad. Solo les interesa la mediocridad porque se saben limitados.

Para vivir en Paz es necesario aceptar al otro libre y respetuosamente. Es necesario aceptar y ser aceptado.  Y es necesario también asumir responsabilidades, aquellas que vienen de la mano con nuestros actos. Solo nosotros somos responsables de lo que hacemos, nadie más.  Nuestras acciones tienen consecuencias, y esas consecuencias pueden ser buenas o malas, de acuerdo con nuestro sistema de pensamiento, pero siempre serán resultado de nuestras acciones. Aprender a aceptar, y aprender a valorar la opinión del otro es importante para vivir en Paz.

Tomamos esta frase de Un Curso de Milagros: 

Cap. 5, II,7,8: “La Paz es más poderosa que la guerra porque sana. La guerra es división, no expansión. Nadie gana en la batalla. ¿Que saca un hombre con ganar el mundo entero si con ello pierde su propia Alma?”

Es nuestro deseo que esta reflexión ayude en estos momentos.  Resuena aun la frase: “La Paz es mas poderosa que la guerra, porque sana”.  Poco a poco, iremos sanando cuando encontremos la Paz. Que así sea.