EL NUMERO OCHO

EL NUMERO OCHO

Esta vibración aplica a los nacidos en los días 08, 17, 26 de cada mes.

Ahora estamos frente al poderoso Número OCHO.  Este número representa la montaña, Kronos, el dictador, la avaricia, la fortuna, el poder, la justicia, la ética. El número OCHO es capaz de asumir retos, compromisos, tareas y por sobre todas las cosas, alcanzar sus objetivos. Es un buen líder de equipos, dedicado y esforzado, que le gusta la perfección en todo sentido. Es un doble cuatro, por lo tanto es muy exigente con todo lo que hace. Es muy exigente, siempre estará pidiendo más, porque considera que todos pueden dar lo mismo que el ofrece. Le cuesta delegar porque espera que todo se haga tal como él lo considera, y cuando no es así, el decide demostrar que es lo que quiere. Le cuesta perdonar cuando siente que no están a su altura. Tiene altas expectativas y es muy ambicioso. La suerte lo acompaña desde todos los puntos de vista, es sumamente afortunado. Todo lo que se propone lo logra.

Este es el número que representa las fuerzas materiales concentradas para auxiliar en la consecución de las aspiraciones del hombre. El poder y la justicia superior que se derrama sobre los seres humanos cuando sus esfuerzos lo merecen, y que lo sitúan material y espiritualmente en el lugar que por su merecimiento le corresponde.  Es una de las vibraciones más poderosas del espectro numerológico debido a su fuerte poder y convicción.  Los números OCHO son enérgicos, combativos, ambiciosos, capaces, equilibrados y seguros de si mismo. Tienen una fuerte personalidad y un espíritu de iniciativa extraordinario.

Extremistas, impulsivos, ambiciosos, luchadores, decididos y muy audaces, generalmente, no le tienen miedo a nada, y se atreven donde otros ni siquiera soñarían. Su osadía nace de la gran seguridad en sí mismos, de su propio juicio y discernimiento.  Son muy racionales, y debido a eso toman decisiones muy bien calculadas, con mucho método y estudio, basados en el análisis de su realidad. Tienen mucho autodominio y concentración, y trabaja inflexiblemente enfocado en su meta.  Están ligados a la eficiencia, el poder, la autoridad, el honor y el éxito. Son personas que siempre llegan a la cima, no importa cuán abajo hayan empezado, son muy trabajadores y siempre logran lo que se proponen superando los obstáculos y los problemas.  Son prácticos, positivos, constructivos, realistas y justos. Ven las cosas tal como son y en todo momento hacen uso del sentido común, de manera que no se engañan a sí mismos ni permite que otros lo hagan.

Extremista y radical, un número OCHO no es nunca ambiguo ni equivoco, y su determinación no acepta medias tintas, la disciplina y la concentración son sus virtudes, y es muy apasionado en la consecución de sus objetivos.   Sumamente organizado, eficiente, progresista, franco, honesto y correcto en sus decisiones. Detestan la mentira, el engaño y la manipulación. Son responsables por sus acciones, y asumen sus obligaciones. En suma son personas integras y sinceras que resultan confiables a los demás, cuando asumen decisiones y contraen responsabilidades.  Es un líder nato, y su autoridad es incuestionable. Poseen un sentido de la justicia y de la ética muy desarrollada.  Siempre intentan ser imparciales, honestos y objetivos en sus juicios.  Tienen también un concepto del honor y de la dignidad muy arraigado que les hace estar cerca de personas  importantes y poderosas.

El símbolo del número OCHO es un octágono.  Es el mismo símbolo del Pakua, un arte marcial chino, en donde se colocan los ocho hexagramas del I-Ching que permite predecir el futuro.  En el espacio, podemos representar un octaedro, es decir un poliedro de OCHO lados. O un cubo, que es un sólido de OCHO vértices. En la cultura china el OCHO es un número poderoso, es el número de la fortuna.

Son muy persistentes y obstinados cuando se trata de alcanzar sus metas.  Sin embargo, cuando los nacidos en esta vibración pierden oportunidades o se sienten fracasados son convierten en tercos y obstinados y sus obsesiones les nublan el entendimiento y la objetividad.  Como tienen un Ego muy grande, creer que siempre tienen la razón, empecinarse en sus errores, juzgar a los otros, o sentirse poderoso ante los demás, son actitudes o sentimientos que a largo plazo los llevan al fracaso o a su propia destrucción.

Y en esta misma dirección, también es muy negativo en el caso de los números OCHO el exceso de ambición.  Muy a menudo le dan mucha importancia al dinero, al éxito, a la posición social y a las cosas materiales, al extremo de no sentirse nunca satisfechos con lo que tienen. Nunca están conformes con lo que alcanzan, y esto los mantiene en constante actividad. Están acostumbrados a la adrenalina que le produce el alcanzar sus objetivos, y hará de su vida una continua búsqueda de nuevas metas.

Asimismo por ser una Vibración de extremos, así como hay un grupo de números OCHO que se auto dominan y mantienen su fuerte carácter bajo control, hay otros que se dejan controlar por su explosivo temperamento, cediendo a frecuentes estallidos de cólera, en algunos casos llegando a ser muy violentos. Uno de sus mayores desafíos consiste en dominar su temperamento.  Son muy arriesgados, pero asumen responsabilidades con sangre fría y son muy calculadores y racionales a la hora de alcanzar sus objetivos.

Deben equilibrar su enorme fuerza, moderar su ambición y mantenerse justos sin descuidar el lado espiritual de su vida.  Su temperamento debe ser usado con cuidado porque de lo contrario se convierten en un instrumento de ruina y destrucción.  Y así como pueden ser ambiciosos, líderes, justos y honestos, sus cualidades negativas los pueden llevar a ser sumamente egoístas, cobardes, pusilánimes y miedosos.

Francisco De Lisa

Coach Numerológico